sábado, 17 de febrero de 2018

Buzón: el vallejo-postal




Quizás no sea el vallejo más bonito del término, pero su sonoro y exclusivo topónimo resulta idóneo para pergeñar un pequeño juego de palabras como el que titula esta entrada.


No he encontrado el topónimo Buzón en ningún otro lugar, nacional ni foráneo. Y es que este topónimo es el resultado de una llamativa evolución: desde Gozón hasta el actual Buzón, pasando por Guzón.

La primera referencia escrita aparece entre la documentación del Obispado de Burgos, en concreto en un documento datado en 1189, por el que Don Lope y su mujer Sancha ceden al Obispo sus bienes en ciertos pueblos, entre los que aparecen Guermezes [Huérmeces], Gozon y Quintanas [Los Casares de Quintana]. (1)

La segunda referencia la encontramos en el Cartulario del monasterio de Santa María de Rioseco, en un documento datado hacia 1219, en el que se detallan unas heredades objeto de venta, entre las que se encuentran Gozon, Guermecee [Huérmeces], Quintanilla de Piedra Avarcha [Quintanilla Pedro Abarca], Sant Pantaliones [San Pantaleón del Páramo] y Rubiales [Ruyales del Páramo] entre otros lugares. (2)

Martínez Díez apunta la posibilidad de que esta denominación Gozon (o Gozan) haga referencia a un nombre de persona (antropónimo), tal y como se testimonia en la documentación del monasterio de Sahagún.

En Castrillo de Rucios, sin embargo, el vallejo es conocido con el nombre de Mozún.

En la zona baja del vallejo se ubicaba el antiguo poblamiento
Esta temprana aparición histórica se debe a la existencia de un antiguo poblado altomedieval en la parte baja del vallejo, casi al lado de la actual carretera. Poblado que no quedaba muy lejano de otros dos: Valcavado (hoy también despoblado) y el actual San Pantaleón del Páramo, por lo que la tradición oral recoge la vinculación entre los tres, denominándolos Los Pantaleones.

Gozón, tal y como muchos otros poblados altomedievales, nacidos al calor de la repoblación de finales del siglo IX y principios del X, no llegaría con vida más allá de principios del siglo XIV, ya que su nombre no aparece en el Libro Becerro de las Behetrías (1352).

Sin embargo, hay quien sostiene que el hecho de no aparecer en el Libro Becerro no significa necesariamente que una pequeña aldea se hubiera despoblado ya en aquellas fechas; quizás su entidad era tan pequeña que las convertía en meros anejos dependientes de una población más importante, que era la que poseía entidad fiscal suficiente como para que mereciera su consignación en el Libro. (3)

Gozón pudo, pues, haber sobrevivido al siglo XIV, aunque no mucho más allá, ya que su nombre -en cuanto a entidad poblacional- no vuelve a aparecer en documentos posteriores.

En una de las fincas sobre las que se supone que se ubicaba el poblado, aún es posible encontrar restos de teja curva, pero no existe resto arquitectónico evidente de construcción alguna. Ni paredes ni siquiera amontonamiento de piedras.

Durante la segunda mitad del siglo XIX, tanto en viejas escrituras como en diversos documentos municipales (relación de roturos, actas de deslinde y amojonamiento) el topónimo registrado para este paraje es Guzón.

El Majuelo de Buzón; al fondo: San Pantaleón del Páramo
Incluso en documentos tan recientes como algunos fechados en los años 30 del siglo XX, aún aparece el topónimo Guzón para nombrar a algún roturo o tierra de labor situados en este paraje.

El cambio de “g” por “b” ha sido, pues, bastante reciente, probablemente debido a la más sencilla pronunciación de esta última. O quizás se lo debamos a algún vecino socarrón, a quien un buen día se le ocurrió la gracieta de pronunciar Buzón en lugar de Guzón. O quizás fue el mal oído de un notario de cierta edad el que registró erróneamente el paraje a la hora de dar fe de una compra-venta.

El Majuelo de Buzón y, a la derecha, su vallejo
Hoy Buzón es un vallejo cultivado sólo en una estrecha porción, la colindante con el camino y arroyo que lo surcan longitudinalmente. Una docena de alargadas fincas y una densa chopera constituyen el paisaje antrópico más destacado. En las laderas norteñas y meridionales, modernas y aberrantes plantaciones de pino pespuntean sus pendientes, sin demasiado éxito repoblador.

Un manantial casi perdido surgía en el curso medio del arroyo, justo al lado de la chopera, causante en parte del desdibujamiento de la fuente.


La vegetación espontánea está formado por matas de aulaga común (ladera Norte) y aulaga almohadillada (en la falda de Itero), tomillos y espliegos, así como por ejemplares aislados de rosal silvestre y jóvenes majuelos. En la zona alta del vallejo, en un pequeño rellano existente en la ladera de Itero, sobrevive un más que notable ejemplar de espino albar: el majuelo de Buzón.

Una pequeña cueva, desconocida para mucha gente, se abre en los cantiles calizos de la zona baja del vallejo, no muy lejos de la supuesta ubicación del antiguo poblamiento. La cavidad tiene un desarrollo escaso y casi vertival, en forma de pequeña sima.




Desde el año pasado, además, Buzón cuenta con un más que rehabilitado camino que lo recorre longitudinalmente en poco más de kilómetro y medio: es la por algunos denominada “autovía de Buzón”. Las cosechadoras –y los vehículos de turismo- agradecerán el cambio, aunque el paraje haya perdido parte de su encanto y proverbial soledad.




El topónimo Gozón aparece hoy en día para nombrar a dos entidades poblacionales en España:

- Gozón de Ucieza: aldea de la provincia de Palencia, situada en la comarca de Vega-Valdavia, a unos 10 km al norte de Carrión de los Condes. En 2017 contaba con 38 habitantes.

- Gozón: municipio (concejo) de Asturias, situado entre Avilés, Candás y el Cabo Peñas, formado por un total de 13 parroquias; 14.500 habitantes, capital Luanco.



Guzón es hoy un apellido poco común, localizado sobre todo en las provincias de Palencia y León; fuera de España, encontraremos personas con apellido Guzón en Filipinas.

El apellido Buzón aparece -sobre todo- en las provincias de Sevilla, Cádiz y Palencia.






NOTAS:

(1) "El Obispado de Burgos y Castilla primitiva: desde el siglo V al XIII", Luciano Serrano, Madrid (1935); [tomo III, página 111: doc. del año 1189: "...totam mean hereditatem quam habeo in Guermezes et in Gozon et in Quintanas et..."]
(2) "El monasterio de monjes bernardos de Santa María de Ríoseco y su cartulario (VIII)". Boletín de la Institución Fernán González nº 161, 15 (1963), [páginas 648-649, doc. del año 1219: "vendo e robro a mi hermana Mari Gonzalvez, la heredad de Vizueces e de Rebolleda en Lezana medium solar, lo de Ríosecco, e de Retuerta, e de Guermecee, Quintanilla de Piedra avarcha en Sant Pantaliones, e en Gozon, en Rubiales,..."]
(3) "Los Lara", Simon R. Doubleday, Turner (2004) [páginas 131-132]

No hay comentarios:

Publicar un comentario